Cómo depilarse los testículos

Depilarse los testículos es una práctica cada vez más común entre los hombres por razones estética, higiénicas y de comodidad.

No cabe duda de que una entrepierna depilada es menos propensa a olores desagradables, infecciones de piojos y está más acorde con los parámetros de belleza modernos.

En la actualidad, casi un 60% prefiere un cuerpo rasurado, mientras que un 35% de los españoles se ha afeitado los genitales por lo menos una vez en la vida; pero esos números tienden a aumentar día con día.

De hecho, los hombres rasurados ganan cada vez más aceptación entre las chicas. Según datos recopilados por la revista Men’s Health, una encuesta realizada entre 400 mujeres, arrojó que el 81% de ellas prefieren hombres total o parcialmente depilados (cuello 52%, pecho 19%, espalda 37%, pubis 55% y trasero un 13%).

Eliminar el vello púbico en realidad es bastante sencillo y existen varios métodos  adecuados para lograr un buen apurado sin irritación ni molestias, pero en el caso de los testículos las opciones se reducen debido a la sensibilidad, forma y textura de la piel.

A continuación te traigo algunos consejos para depilar tus testículos de manera más efectiva con resultados más suaves y seguros:

Prepara tu piel y el ambiente de trabajo

Lava tus testículos con jabón, preferiblemente líquido, neutro y con propiedades antisépticas para eliminar todo tipo de bacterias, sudor, grasa y suciedad.

Introduce tus testículos en un envase con el agua más fría que puedas soportar. Esto tiene el objetivo de que la piel se contraiga, lo que hará mucho más fácil la depilación y reducirá las posibilidades de herirte.

Escoge un lugar bien iluminado y ten a la mano un espejo para poder ver mejor las zonas más difíciles. La ducha puede ser un lugar muy adecuado, sobre todo porque puedes limpiar con facilidad, aplicar espuma todas las veces que desees y repetir el proceso sin preocuparte por los vellos que caen. Recuerda limpiar la rejilla del desagüe al terminar.

Si tus vellos están muy largos debes recortarlos primero con tijeras para facilitar el trabajo posterior. Es este paso debes tener mucho cuidado. Fíjate bien lo que vas a cortar antes de cerrar las tijeras, y hazlo lentamente. Quita todo el vello que sea posible, dejando cañones no más largos de 5mm.

Ahora ya estás listo para comenzar a depilarte, pero debes haber escogido previamente que método vas a usar.

Depilación con crema depilatoria

Existen cremas capaces de remover los vellos de cualquier zona corporal. Son muy efectivas, con un apurado perfecto y más duradero que con máquinas afeitadoras. Sin embargo, debes seleccionar el producto con sumo cuidado y usarlo según las especificaciones del fabricante, ya que de exceder el tiempo de aplicación podrías ocasionarte quemaduras o irritación.

Es recomendable usar cremas para piel sensible, ya que son menos agresivas. Elige las que traen esponjas suaves en vez de las que incluyen espátulas ya que  permiten retirar el vello más rápidamente y en las zonas más delicadas o de difícil acceso.

Antes de usarla lee detenidamente las instrucciones y has una pequeña prueba de alergia. Coloca un poco de la crema de depilación en el dorso de tu mano y déjala actuar por el tiempo indicado en el manual de uso para ver como reaccionas ante la formulación.

En caso de que experimentes comezón, quemazón, comezón o  enrojecimiento lo más indicado es que retires inmediatamente todo el producto e intentes con otra marca.

Método

  1. Aplica la crema: Debes tener los testículos bien secos. Esparce una capa generosa pero uniforme en toda el área utilizando una espátula.
  2. Usa el espejo para garantizar que has cubierto toda la superficie.
  3. Espera el tiempo indicado en las instrucciones. Si notas alguna molestia debes suspender el procedimiento y retirar la crema.
  4. Quita todo el producto con una esponja o toalla suave.
  5. Lava de nuevo la zona para asegurarte de que no han quedado remanentes del producto.
  6. Coloca crema hidratante en la zona para restablecer su lozanía.

Depilación con afeitadora

Es la técnica más popular por su practicidad, economía y rapidez, pero debes tener cuidado al manejar hojas cortantes cerca de tus genitales.

No importa si te decides por rasuradoras eléctricas o prefieres maquinillas desechables, debes asegurarte de que las hojas estén bien afiladas. Muchos hombres prefieren usar cuchillas nuevas o con poco uso para evitar irritaciones o heridas.

Si utilizas equipos eléctricos debes asegurarte de que sea impermeable al agua e inalámbrica, en especial si quieres meterla a la ducha. Emplea los peines guía o accesorios limitadores para impedir que las hojas se pongan en contacto directamente con la piel.

Estos son los pasos que debes seguir:

  1. Sigue los pasos para preparar la piel que te hemos dado anteriormente pero no los seques.
  2. Aplica abundante espuma de afeitar o gel y deja que actúe por un par de minutos. Muchos hombres prefieren cremas sin mentol para piel sensibles en esta zona de su cuerpo.
  3. Pasa la máquina en la dirección al crecimiento del vello para evitar pelos encarnados. Hazlo con paciencia y lentitud, usando el  espejo para revisar el proceso.
  4. Enjuaga los testículos con abundante agua tibia y sécalos con una toalla o con un secador de pelo. También puedes colocar un poco de crema antiséptica para mayor seguridad; algunos incluso se colocan loción after shave, pero puede ser bastante doloroso.
  5. Unta crema hidratante para disminuir la irritación y la picazón.
  6. Recuerda limpiar la máquina. Con cada afeitada quedan microscópicas secciones de piel en las cuchillas, las cuales pueden favorecer la multiplicación de bacterias que pueden ocasionar infecciones en tu próxima afeitada. Colocar un par de gotas de alcohol sobre las hojas puede esterilizarlas sin dañarlas.

Conclusión

Como ya habrás notado, depilarse los testículos es bastante sencillo y te brinda una sensación de frescura muy agradable. Si sigues las recomendaciones que te he dejado, estoy seguro de que podrás disfrutar de un afeitado efectivo y sin ningún tipo de molestias ¡Ahora, manos a la obra!

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